Virgen Pálida
En tus sábanas impuras Dejé marcada la palidez de mi rostro, Que una vez encantó tu corazón. Cuando esclava de tus placeres Me deje llevar sin razón A un mundo desconocido Que habías recorrido tú por mi. Tanto huir, tanto decir no, Ahora ya, quedaron mis besos, mis labios, Mi ser Entre tus brazos que me despojaron de lo mas preciado, Por una y mil veces. Con mentiras, Caricias falaces, Palabras que no eran ciertas ni en tu mundo. Sólo lo era en el mio. Mentiras que mataron a la virgen, Recostada en tu balcón azul, Esperando ser amada. Más tu, En tu arte de manipulación, Sólo buscabas una cosa, Que ingenuamente te di y En tu sacrilegio, Sólo esperaba que dijeras - perdón- Pero a cambio solo tengo tu olvido, Un abandono brutal, Que modestamente me enseña Que los seres celestiales nunca salvan Aquellos hombres atormentados por sus propios demonios. -Por más que se amen, el amor es imperceptible para un alma dañada-