MUERTE DE UN HADA
Amanecer a tu lado es lo único que anhela mi alma, que tu corazón desee lo mismo que yo. Pero mi tiempo se ha terminado, mi magia se agotó entre tus brazos. Ya no puedo transformar tu cariño en amor, y muere mi inocencia, la poca que me quedaba ante el frío final que le das a este amor. El exceso de besos que recorrió mi ser me introdujo en un espejismo fugaz que quise llamar amor y que se deshace poco, ya mis alas no emprenden, eras mi impulso mi motor. Mi magia no puede convencerte. Entonces muero lejos del sueño que un día me embriagó. Solo quiero amanecer a tu lado y volver a vivir.